Descripción
La Asociación Civil Cultiva Ciudad impulsa el proyecto Huerto Tlatelelco en la Ciudad de México, con el desafío de incorporar la conciencia ecológica en un contexto hiper urbanizado. El proyecto desde su inicio se dio a la tarea de fomentar las prácticas de agricultura urbana con énfasis en la producción de alimentos. Se ha trabajado arduo con la intención de reconectar a la gente con conocimientos olvidados y saberes invisibilizados en la ciudad, como es la producción de alimentos para consumo propio.
El espacio que hoy utiliza el Huerto estaba ocupado anteriormente por el Edificio Oaxaca, que formaba parte del conjunto habitacional Tlatelolco en la zona central de la Ciudad de México. Este inmueble resultó gravemente dañado en el sismo de 1985 y fue derrumbado en 1990. Cerca de diez años tardó en limpiarse el predio de los escombros, hasta que en el año 2012 finalmente se crea el Huerto Tlatelolco.
Allí se ofrecen talleres y comparten experiencias en torno a cultivar sus propios alimentos, promocionando el Huerto Tlatelolco los saberes para producir alimentos de consumo cotidiano. Se transmiten conocimientos acerca del cultivar, pues comprender este fenómeno produce un cambio de conciencia en los participantes y se logra dotar a los consumidores de cierta responsabilidad alimentaria. Para liderear esta iniciativa se convocó a la activista Gabriela Vargas asociada con proyectos como el Huerto Reforma, Huerto Roma Verde y Sembradoras Urbanas.
Propósito
El Huerto Tlatelolco está conectado al Objetivo 11: Ciudades y comunidades sostenibles en que, se trabaja colaborativamente desde un equipo base de 5 personas y el resto son habitantes de la ciudad central y de la periferia urbana de la Ciudad de México, de ahí el proyecto conectase con la Meta 11.6 que busca reducir el impacto ambiental negativo per capita de las ciudades, incluso prestando especial atención a la calidad del aire y la gestión de los desechos municipales. Así también la meta 11.7 de proporcionar acceso universal a zonas verdes y espacios públicos seguros, inclusivos y accesibles, en particular para las mujeres y los niños, las personas de edad y las personas con discapacidad. La meta 11.a que habla de apoyar los vínculos económicos, sociales y ambientales positivos entre las zonas urbanas, periurbanas y rurales fortaleciendo la planificación del desarrollo.
También al Objetivo 12: Producción y consumo responsable, donde el conocimiento compartido con respecto a la producción de alimentos genera una transformación entre la comunidad del Huerto. Por ello, se conecta con la meta 12.2 que habla de la gestión sostenible y el uso eficiente de los recursos naturales; y por último a la meta 12.8 que habla de asegurar que las personas de todo el mundo tengan la información y los conocimientos pertinentes para el desarrollo sostenible y los estilos de vida en armonía con la naturaleza.
¿Cómo?
La capacidad de instalación que ha alcanzado el Huerto Tlatelolco para adecuarlo a otros contextos le ha permitido implementar métodos claros y flexibles para las necesidades y alcances de las diferentes iniciativas y sobre todo, perfilar el proyecto a distintos usuarios. Las iniciativas de Cultiva Ciudad y el Huerto Tlatelolco son fáciles de replicar en otros puntos de la ciudad que presenten las condiciones de baldíos urbanos y trabajo local comunitario, aunque el Huerto Tlatelolco sea (por lo pronto) un sólo espacio, es matriz de otras pequeñas iniciativas. El proyecto se comunica fácilmente gracias también a la proliferación de huertos urbanos, que comienzan a volverse comunes para la gente. La necesidad de producir alimento sano y consumir responsablemente se ha convertido en un fenómeno que atañe a cada vez más interesados. No obstante, el Huerto también ha enfrentado resistencias culturales de personas que no transitan con facilidad a modos más sustentables de vida. Abrir un espacio verde en medio de la ciudad central es un reto. Se ha convertido en un problema romper con ciertos estigmas que aún viven entre los habitantes de la ciudad referentes a la suciedad de la tierra, la estética de los frutos, la idea de la basura -y no el reciclaje- o bien pensar que la agricultura es propia del mundo rural. En términos de financiamiento, es un proyecto colectivo que sobrevive de manera limitada. Cuenta con el apoyo de otros colectivos en términos de trabajo, ingresos por inscripciones a los talleres y por la venta de los productos allí cultivados. A pesar de sus limitaciones, el proyecto busca ampliar sus recursos y mejorar sus instalaciones.
¿Procesos de colaboración?
CONECTIVIDAD
El Huerto forma redes desde la Cultiva Ciudad con la Feria Multi trueque Mixhuca, organización que promueve relaciones económicas alternativas con otros mercados y productores orgánicos de otras zonas de la ciudad y el país; y con organizaciones educativas. A su vez los apoyos y patrocinios provienen del gobierno municipal de Cuauhtémoc, de instituciones y colectivos como Ibby México, Huertos Milpa Azul e Isla urbana y de empresas como ZEA Hungry Goods.
DIVERSIDAD
En el Huerto trabajan agrónomos de la Universidad de Chapingo, biólogos y administradores, aunque en los procesos de cultivo participa la comunidad entera; adultos, niños, mujeres y personas con discapacidad, que siembran,
RETROALIMENTACIÓN
Y que en un proceso de retroalimentación aprenden temas asociados a la agricultura urbana, como el compostaje y reciclaje.
Tecnologías, métodos y herramientas
El trabajo en el Huerto permite la transferencia de experiencias y conocimientos. Se producen nuevos compostajes, fertilizantes orgánicos y métodos para construir huertos domésticos adaptándose a las circunstancias de los sitios (ventanas, terrazas, patios, interiores, etc.). La iniciativa Cultiva Ciudad A.C. a su vez desarrolla proyectos de instalación de Huertos en múltiples sitios: escuelas primarias, cárceles, casas, universidades, hospitales, etc. En el Huerto no se usan fertilizantes químicos y la producción es diversa. Se corta y se vende directamente, reduciendo el ciclo de consumo para aprovechar los nutrientes de la planta en sus primeros días.